Antonio Bárcena Rufo (c. 1902-1940) fue un industrial y militar español.
Tras el estallido de la Guerra civil se unió a las milicias populares, integrándose posteriormente en la estructura del Ejército Popular de la República —donde alcanzaría el rango de mayor de milicias—.
Tomó parte en la defensa de Madrid.
[1] Con posterioridad alcanzaría el mando de la 132.ª Brigada Mixta,[2] en el frente de Extremadura.
Hecho prisionero por los franquistas al final de la contienda, fue juzgado en consejo de guerra, condenado a muerte y ejecutado en Badajoz el 10 de agosto de 1940.