Antiagregante plaquetario

En este proceso de agregación plaquetaria están implicados diferentes moléculas y en función de qué molécula es la que alteran se clasifican los diferentes antiagregantes.En la actualidad, el antiagregante más empleado es la aspirina o ácido acetilsalicílico (AAS) que actúa disminuyendo la síntesis de una molécula pro-agregante, debido a que la sangre coagula de manera inmediata es posible que el plasma sanguíneo tenga estas propiedades antiagregantes.[1]​ El fármaco antiagregante plaquetario ideal será aquel que inhibe las vías de activación plaquetaria, estimule las de inhibición o, lo más aproximado a lo ideal, ambas cosas a la vez.[2]​ Pueden ser endógenos, desencadenados durante la activación plaquetaria y a la generación de fibrina, que tiende a limitar la extensión del trombo y prevenir la coagulación sistémica.Los más importantes inhibidores son la prostaciclina (PG I2), el óxido nítrico, antitrombina III, la proteína C y el sistema fibrinolítico.
Clasificación de antiagregante plaquetario (inglés).