Aneurisma micótico

Los aneurismas micóticos o aneurismas infecciosos son ensanchamientos peculiares focalizados y persistentes de una arteria debidos a debilidad en la pared del vaso sanguíneo relacionada con infecciones de cualquier tipo, normalmente bacterianas.[1]​ En 1885 Sir William Osler empleó el término aneurisma micótico para describir un aneurismo en forma de seta en un paciente con endocarditis.Una vez detectados deben tratarse sin demora, pues su evolución natural es hacia la rápida expansión y rotura.[4]​ Los aneurismas infecciosos, pese a su escasa prevalencia, suponen un desafío para los cirujanos vasculares que se enfrenta a ellos, dado que el diagnóstico precisa de un índice de sospecha muy elevado, habitualmente ante un paciente comprometido con sepsis, rotura arterial y localizaciones atípicas.[1]​ Los aneurismas micóticos por Aspergillus son raros y suelen presentarse en el contexto de una aspergilosis pulmonar invasiva, bien por émbolos sépticos o por extensión directa desde los pulmones, por ello la localización más frecuente es en el cayado aórtico y aorta ascendente.
Aneurisma micótico de la arteria axilar.
Aneurisma micótico de la arteria ilíaca izquierda.