Alimentación forzosa en Guantánamo

[1]​[2]​[3]​[4]​[5]​[6]​ En 2005, el capitán John Edmonson, que era en aquel entonces el jefe médico de la base, afirmó que la alimentación forzada por vía nasal era el último recurso, utilizado únicamente cuando el asesoramiento a los detenidos fallaba y el índice de masa corporal del detenido bajaba por debajo de niveles saludables.De acuerdo con Edmonson, los detenidos normalmente cooperaban y era innecesario atar a los prisioneros.[2]​ Según estas declaraciones, a los detenidos se les daban únicamente 1500 calorías al día.y otros abogados del detenido Mohammad Bawazir registraron una reclamación en la que calificaban la alimentación forzosa como tortura.[9]​ Los abogados acusaban a los militares de llevar a cabo la alimentación forzada, de forma innecesariamente dolorosa y humillante, para acabar con una huelga de hambre en la que en alquel momento participaban 100 detenidos extrajudiciales.
Kit de alimentación forzada en Guantánamo, mostrando sonda nasal, bolsa de alimentación por gravedad y líquido nutritivo.
Silla utilizada para atar a los prisioneros mientras se le introducen los nutrientes por la fuerza, nótese que el asiento está recubierto con un plástico debido a que los presos son mantenidos atados sin permitírseles ir al baño, por lo que se ven obligados a orinarse y defecarse encima.
Cuando un detenido se salta nueve comidas, es sometido a alimentación forzada, para lo cual es atado a una cama o silla, el procedimiento de atar a los presos se utiliza también para todos los procedimientos médicos y dentales.