Alicia de Larrocha

Allí conoció a Arthur Rubinstein, Alfred Cortot, Conchita Badia y otros grandes pianistas de la época.

[5]​ Cuando Marshall abandonó España en 1936, se vio obligada a proseguir sus estudios por su propia cuenta hasta 1939, cuando reanudó el trabajo con su maestro hasta la muerte de este, continuando sus pasos al frente de su academia desde 1959.

A partir de 1947 ofreció conciertos en diferentes ciudades europeas, pero fue en 1954, al protagonizar una gira por los Estados Unidos con la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles, invitada por Alfred Wallenstein, cuando empezó su reconocimiento internacional por su impecable técnica al piano.

[12]​ Sus álbumes han sido editados, entre otros, por Decca, EMI, RCA, CBS, Philips (Eloquence), Sony, Ariola o RTVE.

[15]​ Ha sido la única intérprete española incluida en la recopilación de los 74 grandes pianistas del siglo XX, editada por el sello Philips con la colaboración de diversas compañías discográficas.