Señala también que Sabio no olvida a los hijos ilustres, pero se centra en la acción colectiva de los agentes sociales.
Según el historiador Josep Fontana es «un libro realmente valioso» al que considera el mejor de cuantos se han publicado sobre la transición española.
Fontana destaca favorablemente que, a diferencia de muchas otras obras que consideran la transición como obra casi exclusiva del rey Juan Carlos y el presidente Suárez, el libro señala la presión de la sociedad como elemento fundamental para que el cambio fuese más allá de lo inicialmente previsto.
Con amplio uso de fuentes documentales nuevas, el libro llega a la conclusión de que «la democracia española no fue una democracia otorgada, sino conquistada con evidente esfuerzo y abundante riesgo y sacrificio».
Sabio se sirve de entrevistas realizadas a antifranquistas en las que estos narran su experiencia.
La obra conjuga los enfoques macro y microhistórico, intercalando las experiencias personales reflejadas en los informes gubernativos con la explicación acerca del contexto nacional e internacional de cada momento.
Memorias de un fiscal del Tribunal Supremo en 1936, escritas por José Luis Galbe Loshuertos.
Considera que, aunque la relación de presos está hecha con rigor académico, «tiene también unos indudables ecos morales».