En mayo de 1771 los Marathas que habían ocupado Delhi lo invitaron a volver y en diciembre se presentó en Delhi (contra el consejo de los británicos que le confiscaron Allahabad y Kora y le retiraron la pensión) donde lo proclamaron emperador (enero de 1772), reconociéndose servidores del Imperio.
El emperador ordenó represalias por un ataque sikh en Delhi al año siguiente y el wazir Abdul Ahid Khan Madjad al-Dawla avanzó con el príncipe heredero y 20 000 hombres contra los sikhs pero fue sobornado e hizo la manera de reducir la fuerza a unos seis mil hombres, y así el ejército mogul fue derrotado en Muzzaffargarh.
El asunto fue detectado y el wazir arrestado y se le recuperó una gran cantidad de dinero; al cabo de un tiempo, no obstante, fue repuesto a su cargo por el mismo emperador.
La cabeza maratha Scindia y sus aliados jats volvieron en auxilio de su soberano y capturaron a Ghulam Kadir al que mataron, pero el Imperio había dejado de existir fuera del Fuerte Roig.
La ciudad fue ocupada unos años después por el general Lake (julio de 1803) por temor a que la figura del emperador fuera aprovechada por los franceses.