Agua de Solares

Las aguas del manantial de Fuencaliente son conocidas por sus propiedades medicinales desde el siglo XIII,[1]​[2]​ y fueron declaradas de utilidad pública en 1828.

En 1857 fue edificada la primera casa de baños sobre el manantial de Fuencaliente,[2]​ y un año más tarde, en 1828, sus aguas fueron declaradas Agua Mineral de Utilidad Pública, y embotelladas con el nombre actual,[1]​ aunque en un primer momento, al ser consideradas medicinales, sólo se encontraban en farmacias.

[3]​[4]​ En 1977, fue detectada en varias partidas de la marca la presencia de pseudomonas aeruginosa, una bacteria que, si bien no se encontraba en cantidades suficientes para resultar nociva para el organismo, sí se encontraba entre las pseudomonas prohibidas por la legislación.

[3]​[4]​ Además, el asunto afectó su pujante irrupción en Francia y los países árabes, donde había pasado todos los controles pertinentes.

[8]​ Tras la grave crisis, Agua de Solares procedió al cierre del balneario, y llevó a cabo distintas actuaciones técnicas en su embotelladora, lo que le permitió una paulatina recuperación bajo la nueva denominación de Manantial de Fuencaliente S.A.[9]​ En 2006, la empresa finalizó la reforma del Gran Hotel Balneario, que supuso una gran inversión, lo que unido a una caída en las ventas provocó una importante crisis y algunos impagos a sus empleados.

Casetas de baño patrocinadas por Agua de Solares en la playa de El Sardinero de Santander (1925).
Hotel Balneria de Solares.