Tanto los agramonteses como los beamonteses mantenían alianzas con los llamados Parientes Mayores, especialmente los considerados banderizos que protagonizaron las guerras de bandos en territorios históricos vascos y cántabros.
El hijo de Leonel, Felipe, fue nombrado mariscal del reino en 1428.
[4] Los agramonteses en todo momento apoyaron al poder que ostentaba la corona, primero a Juan II y después a los reyes Catalina de Foix y Juan de Albret.
Fernando el Católico, aprovechando esta guerra y su alianza con los beamonteses conquistó el Reino de Navarra en 1512.
Gracias a la colaboración de los beamonteses, la conquista se realizó en relativamente poco tiempo.
En 1512, en 1516 y en 1521, aunque, sobre todo en el último intento, también hubo una amplia participación de beamonteses.