Aglaonice
Vivió en Tesalia, y se deduce que estudió en Mesopotamia, pues conocía a la perfección los ciclos de los eclipses de Saros, que el pueblo Caldeo conocía, y con los cuales podía predecir eclipses con mucha precisión para la época.Así, se prefirió creer en sus poderes sobrenaturales antes que en su capacidad matemática y de observación celeste por poder predecir el momento en que iba a suceder un eclipse lunar.Fueron conocidas como «las brujas de Tesalia», grandes astrónomas que estudiaron los ciclos lunares y los eclipses, los cuales sabían predecir con gran precisión para la época y tuvieron su actividad entre los siglos III y I a. C.[8][9] Para hacer estos cálculos, Aglaonike usaba tablillas babilónicas con un listado de eclipses.[7] Hacen referencia a ella en sus escritos personales autores como Plutarco y Apolonio de Rodas,[4][7] u Horacio, Platón o Virgilio, entre otros.[9] Algunas de estas referencias son las siguientes: En el diálogo de Platón, Gorgias, Sócrates dice: «Pero sí hay que temer, querido amigo, que no nos ocurra, lo que se dice sucede a las mujeres de Tesalia cuando hacen descender la Luna».