[1] Junto con su hermano, marchó a la Guerra de Troya (a pesar de las súplicas de su padre, un vidente, que podía prever que la muerte los esperaba en el campo de batalla).
[3] En la lucha, es derribado por Menelao quien lo hace prisionero esperando obtener un buen rescate.
Pero Agamenón le reprocha su piedad hacia un troyano.
Menelao cambia entonces de opinión, suelta a Adrasto y Agamenón lo ensarta con su lanza dándole muerte.
La villa de Adrastea (Propóntide) le debe el nombre.