Aunque al final, el padre que encarna el modelo autoritario se arrepiente, Terencio tampoco parece inclinarse por una educación excesivamente permisiva.
Más bien parece abogar, como en tantas otras ocasiones, por un ideal basado en el término medio.
[2] Como ya se ha advertido al principio, la comedia trata sobre qué tipo de educación es mejor, una severa y rígida, u otra más liberal y abierta.
Esquino, el joven educado de manera liberal, se apodera de la cortesana Báquide, pero no lo hace para satisfacer sus propios instintos, como todos creen, sino para entregársela a su tímido hermano Ctesifonte, que no se atreve a obrar por miedo a su padre.
Al final, todo se descubre, y los dos jóvenes logran casarse con la muchacha a la que amaban: Ctesifonte, con la cortesana Báquide; Esquino, con la virtuosa Pánfila.