Acuerdo Multilateral sobre Inversiones

Las empresas tendrían campo libre para buscar el beneficio por encima de cualquier otra premisa.

Al mismo tiempo, los trabajadores se enfrentan a una mayor presión para aceptar sueldos más bajos y peores condiciones de contrato: estos derechos adicionales que el AMI ofrece a los inversores no están equilibrados con responsabilidades añadidas por su parte, sean sobre derechos laborales o protección medioambiental.

Los países en desarrollo, cuyas industrias locales están siendo las primeras en sufrir la competencia sin control de las transnacionales, manifestaron su preocupación por los posibles efectos del AMI.

Aún hoy estas organizaciones afirman que el acuerdo convertiría en irrelevante al voto democrático, crearía un mundo dividido entre "superciudadanos" y subempleados, liberando a las corporaciones de las obligaciones con los trabajadores y el medioambiente.

En definitiva, no resulta exagerado afirmar que el AMI supuso y supone un desafío para la democracia en todos los países del mundo.