Acoso callejero
Otra definición más amplia del acoso callejero afirma que es tanto un lance sexual indeseado como una intrusión no solicitada de los acosadores en los sentimientos, pensamientos, actitudes, espacio, tiempo, energías y cuerpos de las víctimas.En este tipo de acoso, el acosador se siente con el derecho de interpelar a las víctimas en la calle sin haber recibido previamente su consentimiento y entendiendo que sus comentarios y acciones hacia las víctimas están justificadas, son halagos o son socialmente aceptadas.El estudio concluyó que los estadounidenses de entre 18 y 29 años son los más propensos a entender estas prácticas como algo bueno.[cita requerida] En un artículo publicado en el año 2000, basado en un "Estudio Canadiense de Violencia Contra las Mujeres",[¿cuál?]También un grupo llamado Stop Street Harassment empezó como blog en 2008 y llegó a formarse como organización sin ánimo de lucro en 2012.Este activismo ha utilizado vídeos virales para publicitar la frecuencia de comentarios indeseados que las mujeres reciben en espacios públicos.Una artista callejera usó Kickstarter para financiar una campaña llamada "Stop Telling Women to Smile" (Dejad de Decir a las Mujeres que Sonrían).Una mujer de Mineápolis creó una serie de "Cards Against Harassment" (Cartas Contra el Acoso), en homenaje al juego Cards Against Humanity (Cartas Contra la Humanidad), que ella distribuía entre acosadores callejeros.Se ha planteado examinar los efectos que estos programas tienen en cuanto al conocimiento y las actitudes relacionadas con las agresiones sexuales, el comportamiento de los transeúntes, su intervención al momento de presenciar una agresión sexual, entre otros factores.