Acodo

Como en toda reproducción vegetativa, los nuevos individuos son similares genéticamente al progenitor.

La tierra con la cual se hace el acodo debe ser ligera y ha de conservar la humedad, para lo cual puede cubrirse con mantillo u otra materia.

Se acodan de este modo los arbustos sarmentosos que arraigan con facilidad.

Esta técnica se emplea comúnmente para reproducir patrones a partir de una "planta madre".

Con las plantas de tallos leñosos el acodo consiste en raspar una rama joven, para luego ser espolvoreada con hormonas, formadores de raíces y musgo húmedo, al generarse raíces se corta la rama y se trasplanta.

Esquema de la reproducción por acodo
Planta de tallo leñoso
Acodo por corte y recalce