Son normalmente construidos en una caja autónoma y ahora suelen ser conectados de forma directa al Internet.
[2] Estos instrumentos registran la aceleración sísmica, velocidad y desplazamiento del suelo e intensidad espectral.
Estos suelen ser chips microelectromecánicos (MEMS) que son sensibles en una dirección.
A diferencia del sismómetro que opera continuamente, los acelerómetros por regla general trabajan en un modo provocado.
Otros análisis son usados para mejorar el diseño de edificios o para ayudar a localizar las estructuras importantes en áreas más seguras.