Abu-Úmar ibn Saíd (en árabe: أبو عمر بن سعيد, Abū ʿUmar b. Saʿīd) (?-1287) fue el último rais de la Taifa de Menorca (1282-1287), hijo y sucesor de Abu Uthmán Saíd ibn al-Hákam al-Qurashi.
Bugron, el señor de Constantina, había conspirado secretamente con Pedro haciéndole creer que se convertiría al cristianismo y cedería su ciudad y zona portuaria a la Corona de Aragón.
Según la Crónica de Muntaner, Abu-Úmar ibn Saíd envió mensajeros a Argelia poniendo al descubierto la trama.
Abú Úmar ibn Said se enfrentó a los invasores con tropas mercenarias de África del Norte; la primera batalla tuvo lugar el 17 de enero y el ejército musulmán acabó por refugiarse en el castillo de Santa Águeda.
[1] En aquella fortaleza lograron resistir durante tres días.