El aborto inducido o interrupción voluntaria del embarazo es legal en Turquía desde 1983 hasta las 10 semanas de gestación –dos meses y medio- a petición de la mujer.
[3] Hasta 1983 el aborto era legal en Turquía solamente para salvar la vida o la salud de la madre y en el caso de malformación del feto.
Durante la década de 1980 se produjo una alta y creciente incidencia del aborto inseguro en Turquía –con altas cifras de morbilidad y mortalidad de las mujeres embarazadas que practicaban el aborto inseguro-.
En Turquía, los abortos más tempranos se realizan en su mayoría en áreas urbanas y los cercanos a los límites legales en el medio rural por lo que la práctica temprana está asociada con la educación.
El porcentaje de la práctica del aborto aumentaba con la edad y con la supervivencia del número de hijos –aquellas mujeres que ya tienen hijos supervivientes- por lo que también se asocia el aborto inducido con la edad, la educación de la mujer y el marido.