Proviene directamente de la letra alfa del alfabeto griego.
En el alfabeto cirílico antiguo su nombre era azǔ y representaba al número 1.
Es utilizada en las lenguas rusa, macedonia, búlgara, serbia, ucraniana y bielorrusa, donde representa la vocal /a/.
Después de sufrir varias transformaciones, actualmente se escribe de manera similar a la letra A del alfabeto latino.
Esta letra tiene un valor de 1 en el antiguo sistema numeral cirílico.