Żurek (polaco: Zhoorek) es una película dramática polaca de 2003 dirigida por Ryszard Brylski basado en una historia de Olga Tokarczuk.
En un pequeño pueblo de provincias vive Halina con su hija Iwonka, una adolescente que sufre un retraso mental ligero.
Su marido se suicidó arrojándose delante de un tren en marcha.
Ivonka tiene un bebe, pero no quiere decir quién es el padre.
Su madre jura sobre la tumba de su esposo, que antes de Nochebuena el niño será bautizado y recibirá el nombre de su padre.