Ascaris

Entre ellas se encuentra el Ascaris lumbricoides, que afecta a millones de seres humanos y Ascaris suum que afecta a gran cantidad de cerdos.[1]​ Una vez en el intestino, un Ascaris puede llegar a medir entre 20 y 30 centímetros de longitud.Se trasmiten por vía oral-fecal, es decir, a través de la suciedad y por haber tocado algo sucio y haberse llevado posteriormente los dedos a la boca.El Ascaris adulto vive en el hospedador, la hembra puede llegar a producir cerca de 200.000 huevos diarios particularmente resistentes,[2]​ los cuales son evacuados al exterior junto con las heces.Si un huevo es ingerido (junto con el alimento, tierra, agua o heces), las larvas pasan por diversos órganos como el corazón y pulmones hasta alojarse en el intestino donde el parásito completa su desarrollo hasta la madurez.