Árni era monárquico lealista y amigo del arzobispo de Niðaróss (Trondheim), por lo que visitaba a menudo Noruega, donde murió (en Bergen) en 1298.
La trama se centra en dos temas principales: los conflictos en Islandia entre el poder de la Iglesia y la autoridad secular sobre la propiedad eclesiástica (staðamál), y la ratificación de Jónsbók en el Althing (1281).
La saga se muestra claramente favorable a la autoridad clerical.
[1] Árna saga biskups se encuentra en manuscritos que contienen la última parte de la saga Sturlunga, y comparte el mismo estilo descriptivo, aunque profundamente enlazada con reflexiones piadosas sobre los asuntos de los hombres.
La saga se considera entre las más importantes fuentes sobre la política entre Noruega e Islandia en la Edad Media.