La planta crece desde África, donde es presente en casi todos los países, hasta la India.
Salvadora persica abunda en sitios secos, en suelos arenosos o sálicos.
Su nombre se refiere al hecho de que sus brotes, raíces y ramas son usadas tradicionalmente para la higiene dental.
Entre las costumbres islámicas antes de realizar la oración a Dios, es recomendable el aseo oral con este cepillo, al cual se refiere como Miswak o Siwak, según el hadith recogido por Bujari y Muslim: La Planta contiene minerales, filamentos, proteínas y sustancias inhibidoras de la germinación.
Salvadora persica fue descrita por Carlos Linneo y publicado en Species Plantarum 1: 122, en el año 1753.