El trilobites más antiguo que se conoce podría ser del género Fallotaspis, incluido dentro de Redlichiida.
Los Olenellidae, una familia de Redlichiida, tenían a menudo las espinas más largas en el tercer segmento torácico.
Suelen presentar largas y fuertes espinas genales proyectadas a veces por el borde cefálico.
Su desaparición marca el límite entre el Cámbrico inferior y medio en las zonas que se encuentran organismos de este suborden.
Estos organismos sí que poseen sutura facial y sus restos se suelen encontrar sin librígena.
La relación entre ellos radica en ciertas características tales como la presencia de espinas en los numerosos segmentos torácicos, el micropigio, o los prominentes ojos.