En la mitología griega , Chelônê ( griego antiguo : Χελώνη de khelônê que significa tortuga) era una oréada del monte Khelydorea ("rico en tortugas") en Arkadia . [1]
Cuando todos los dioses, hombres y animales fueron invitados por el mensajero divino, Hermes , a asistir a la boda de Zeus y Hera , la ninfa Quelona se quedó sola en casa, para demostrar su desprecio por la solemnidad. Pero Hermes descendió entonces del Olimpo , arrojó al agua la casa de Quelona, que se encontraba en la orilla de un río, junto con la ninfa, y la transformó en una perezosa tortuga, que a partir de entonces tuvo que llevar su casa a cuestas. [2]
"Para su boda con Juno (Hera), Júpiter (Zeus) ordenó a Mercurio (Hermes) que invitara a todos los dioses, hombres y animales a la boda. Todos los invitados por Mercurio (Hermes) acudieron, excepto Quelona que no se dignó estar allí, burlándose de la boda. Cuando Mercurio notó su ausencia, volvió a bajar a la tierra, arrojó al río la casa de Quelona que estaba sobre el río y cambió a Quelona en un animal que llevaría su nombre. Quelona se dice testudo (tortuga) en latín."
La fábula cuenta que el rey de los dioses invitó a todos los animales a su boda, pero la tortuga nunca llegó. Cuando le preguntaron por qué, su excusa fue que prefería su propia casa, por lo que Zeus la hizo llevar su casa consigo para siempre. [3]
"Zeus invitó a todos los animales a su boda. Sólo la tortuga estaba ausente, y Zeus no sabía por qué, así que le preguntó a la tortuga ( khelone ) su razón para no haber venido a la fiesta. La tortuga dijo: "Por humilde que sea, no hay lugar como el hogar". Zeus se enojó con la tortuga y le ordenó que llevara su casa consigo a dondequiera que fuera".
"Junto al monte Kyllene hay otra montaña, Khelydorea (Chelydorea), donde se dice que Hermes encontró una tortuga, tomó el caparazón de la bestia y con él hizo un arpa". [1]