La pava caucana ( Penelope perspicax ) es un ave de la familia Cracidae . Es una pava grande y, como la mayoría de las pavas , lleva una vida principalmente arbórea en bosques húmedos, donde busca frutos y hojas. La pava caucana es endémica del valle del río Cauca en Colombia .
En español el pájaro se llama pava caucana . [2] [3]
El ave fue descrita formalmente por primera vez en 1911 por el ornitólogo estadounidense Outram Bangs , basándose en el espécimen tipo recolectado el 5 de junio de 1908 por Mervin G. Palmer en San Luis, en el valle de Bitaco, en el oeste de Colombia . [4] Las cuatro principales autoridades taxonómicas reconocen a la pava caucana como una especie. [5]
El nombre del género Penélope deriva del griego antiguo penelops , un tipo de pato que se dice que rescató a Penélope después de que ella fuera arrojada al mar. El epíteto de la especie perspicax significa en latín «de vista aguda». [6]
La especie es monotípica : no se reconocen subespecies . [7]
Son aves grandes, que miden entre 75 y 85 cm de largo, con el cuerpo regordete, la cola larga y la cabeza pequeña típicos de las especies Cracidae. La cabeza, el cuello y el manto de la pava caucana son de color gris oscuro, que se mezcla con el color castaño rojizo de la rabadilla, las escapulares, las coberteras alares y las superficies superiores de la cola. Las plumas de vuelo primarias son de color marrón grisáceo. La parte inferior de las plumas de la cola es gris. Las plumas grises del manto, la garganta, el pecho y el vientre están delineadas en blanco, lo que crea una apariencia escamosa. El ave tiene un prominente saco gular rojo brillante que es más grande que el de la pava andina, una especie que puede confundirse. Los tarsos y las patas son rojos, al igual que los ojos. El pico es gris oscuro. [8] [9]
La pava caucana es endémica de Colombia. Históricamente se la encontraba en el valle del río Cauca entre el departamento de Quindío y el cerro Munchique en Cauca , y en la vertiente pacífica de la Cordillera Occidental (Andes occidentales) en el Valle del Cauca y Cauca. También pudo haber estado presente en las cabeceras del río Magdalena . En la década de 1980 se pensaba que estaba extinta, pero desde entonces se han encontrado pequeñas poblaciones sobrevivientes en los departamentos de Cauca, Valle del Cauca, Quindío y Risaralda . [3]
El rango altitudinal de la pava caucana está entre los 900 y 2500 metros sobre el nivel del mar. Habita en bosque húmedo primario y secundario, bordes de bosque y plantaciones arbóreas, incluyendo plantaciones de especies introducidas como Fraxinus sinensis ( fresno chino ) y Pinus patula (pino pátula). [8] [3] [10]
Las pavas caucanas buscan alimento en arbustos y árboles, típicamente entre 2 y 20 m sobre la superficie. La mayoría de las actividades de búsqueda de alimento son llevadas a cabo por aves solitarias o grupos familiares de 3-4, aunque ocasionalmente se reúnen grupos de hasta 30 individuos. Se alimentan principalmente de frutas y en menor grado de hojas y flores. Son alimentadores generalistas: un estudio identificó que estas pavas consumían 89 especies de frutas, 11 especies de flores y 11 especies de hojas. La mayoría de las frutas las comen enteras, aunque muerden pedazos de frutas más grandes como las de Ficus cuatrecasana (Higuerón), Solanum sycophanta (Tachuelo) y Cecropia telealba . [11] [12] : 18–19
En períodos en que la fruta es escasa (septiembre a diciembre) se les ha observado alimentándose abundantemente de hojas tiernas de fresno chino , una especie introducida. [11]
Las pavas caucanas también buscan presas invertebradas en el suelo. Se han observado grupos de 3 a 7 aves siguiendo enjambres de hormigas guerreras ( Labidus praedator ) durante períodos prolongados, devorando a los invertebrados que huyen del enjambre que avanza. [12] : 18–19
Se ha observado a estas pavas alimentándose con otras especies, incluidas la pava alifalda , la corneja frutera de collar rojo , el gallito de las rocas andino , la urraca inca , el tucán de lomo rojo y el tucán esmeralda , así como con aves y mamíferos más pequeños. Las pavas caucanas no parecen ser agresivas ni mostrar un comportamiento territorial hacia estas otras especies, pero defenderán una buena fuente de alimento de otras pavas caucanas. [12] : 21
La época de reproducción varía según las condiciones ambientales y la disponibilidad de alimentos. En el Santuario de Fauna y Flora Otún Quimbaya la reproducción se realiza de enero a junio, coincidiendo con los períodos de mayor abundancia de frutos, aunque se han encontrado nidos activos desde diciembre. En la zona de Yotoco la reproducción parece ocurrir a finales de año. [12]
Se han descrito pocos nidos, pero parece que suelen estar construidos con hojas y ramitas secas y ubicados a 1-2 m sobre el suelo en árboles o arbustos. Un nido encontrado en la Reserva Natural del Bosque de Yotoco fue descrito como “no muy elaborado”. Fue construido en un matorral de helechos a aproximadamente 1 m sobre el suelo. El nido era una construcción circular que consistía en ramitas y frondas secas de helecho, con dimensiones externas de 34 cm de diámetro y 25 cm de profundidad. Se encontraron dos huevos blancos grandes que pesaban entre 94 y 96 g. (A modo de comparación, un huevo de gallina extra grande pesa aproximadamente 64 g). Los huevos son incubados solo por las hembras. Un tamaño de puesta de 2-3 huevos parece ser típico, según las observaciones de parejas adultas con uno, dos o tres juveniles. [12] [13]
La pava caucana tiene un repertorio de varios llamados: un llamado de alarma graznido que se repite en una serie rápida, un llamado prolongado parecido a " kōō'EEl ", y un fuerte traqueteo de alas que se escucha a menudo en la mañana y que también parece ser parte de los rituales de cortejo. [12] [9] [14]
La pava caucana es una especie vulnerable y está incluida en la Lista Roja de la UICN y en el Libro Rojo de Colombia. Si bien originalmente se encontraba en un área de 24.900 km2 , ahora está restringida a cuatro sitios discontinuos que suman un total de 750 km2 . Se estima que la población total varía entre 2.500 y menos de 1.000 aves adultas, y solo una población supera los 250 adultos. [2] [15]
La principal amenaza es el aislamiento de la especie en pequeñas poblaciones relictas debido a la deforestación y la fragmentación del hábitat . Las áreas donde se sabe que sobrevive el ave están rodeadas de grandes extensiones de tierra deforestada, por lo que no existe potencial para que las poblaciones crezcan más allá de la capacidad de sustentación de estos fragmentos.
Estas pocas poblaciones pequeñas están en riesgo por la caza y la caza furtiva. Las aves grandes son fuentes atractivas de carne y la pava caucana, al ser grande y ruidosa, puede ser relativamente fácil de encontrar. Un estudio concluyó que hasta 100 aves mueren anualmente dentro y alrededor del núcleo poblacional principal en el área de Risaralda-Quindío. Las poblaciones más pequeñas en algunos de los otros fragmentos de bosque están particularmente en riesgo de extinción debido a la caza. [2]
Los dos remanentes poblacionales más grandes se encuentran dentro de áreas protegidas (PNR Ucumarí/SFF Otún Quimbaya y Reserva Natural Bosque de Yotoco). Estas poblaciones parecen haberse estabilizado y no se espera que disminuyan. [2]
En 2005 se publicó un plan de conservación y se están realizando seguimientos de las poblaciones. En el bosque de Yotoco, el seguimiento lo llevan a cabo estudiantes universitarios y voluntarios, lo que se considera más sostenible que el que realizan biólogos profesionales. [16] [17]
El Zoológico de Cali opera un programa de cría en cautiverio de la pava caucana, que será útil si surgiera la oportunidad de reintroducir la especie en un hábitat adecuado. [18]