Ofelimidad (del griego "Ophelimos" "útil") es un concepto económico introducido por Vilfredo Pareto como una medida de satisfacción puramente económica, de modo que pudo utilizar el término ya bien establecido de utilidad como una medida de una satisfacción de base más amplia que abarca también otras dimensiones, como la ética, la moral, la religiosa y la política. [1] Como tal, corresponde al sentido en el que la utilidad se utiliza a menudo en los cálculos económicos. Irving Fisher propuso reemplazar la ofelimidad (y por lo tanto la utilidad como se interpreta comúnmente) por el término deseabilidad . [2]
Ugo Spirito , según el profesor A. James Gregor , utilizó el término "ofelimidad" [3] para significar "la satisfacción del individuo (de la cual) él es el único juez". - "Hacer que la satisfacción del individuo sea única e imposible de comparar a lo largo del tiempo o intersubjetivamente". Reduciendo la realidad social y económica fundamental a una consideración de la interacción entre lo que los cartesianos identificaron como "mónadas sin ventanas". Esto coloca el uso de Spirito en aparente reversa del uso verbal particular de Pareto, y como él lo entendió como el sello distintivo de la idea corporativista-sindicalista del "totalitarismo", que se convierte en un "estado total" en virtud de que sistematiza cada interés, donde se incorpora, como un reflejo público (en el gobierno estatal) de la voluntad única particular del sindicato de organizarse socialmente por esfera de seguimiento gremial voluntario. Para que luego su contribución privada se convierta en una corporación pública en el estado en su totalidad. Tales intereses sindicales faccionales son incognoscibles (en el sentido gentiliano ) sin la cohesión de lo que sería un estado general. Lo cual sólo podría concebirse como el proceso natural de asociación que requirió, en la forma en que se convierte en una instancia establecida en el pasado, que tal estado luego se autoidentifique en el flujo de variación personal y social para realizarse. Esto haría que las esferas pública y privada se codificaran recíprocamente , el estado y cada facción, tal como lo están en el presente para toda representación de agregados adicionales que se acumulen más allá del horizonte de la sistematización del estado en el futuro. Este programa existe en contraste deliberado con toda apropiación económica, material y atomista por parte de intelectuales de la teoría socialista contrastada, entonces en desacuerdo con el fascismo italiano de Spirito, como el comunismo y el liberalismo clásico.