Latría es un término proveniente del latín latrīa, y este a su vez del griego λατρεια, que significa "adoración" o "culto".Y el término o sujeto en el que recae la devoción se refiere exclusivamente a Dios.En efecto, el culto a los santos no termina en ellos, sino en Dios mismo.[1] Ya que, en el decir del propio Jesucristo citando a Deuteronomio 6, 13: En el catolicismo, la veneración a los santos se concibe como el respeto que se les debe por su dignidad, grandes virtudes, y su bienaventuranza en Dios, y recibe el nombre de dulía.En las religiones monoteístas se considera siempre y de suyo una falta gravísima por la injuria que con ella se hace a Dios Otro ejemplo de la utilización del término «latría» como sufijo es en la palabra «egolatría», entendida como culto, adoración o amor excesivo de sí mismo.