Voz jadeante

Otros, como Laver, Catford, Trask y los autores de los Voice Quality Symbols (VoQS), equiparan el soplo a la voz susurrante en la que las cuerdas vocales o, al menos, la parte anterior de las cuerdas vocales vibra, como en la voz modal, pero los cartílagos aritenoides se mantienen separados para permitir un gran flujo de aire turbulento entre ellos.

En ese modelo, el soplo es una fonación compuesta de aproximadamente voz modal más susurro.

El resultado es un flujo de aire intermedio entre la [h] y las vocales, como ocurre con la /h/ intervocálica inglesa.

La distinción entre las dos últimas de estas realizaciones, las cuerdas vocales algo separadas a lo largo de su longitud (voz jadeante) y las cuerdas vocales juntas con los aritenoides haciendo una abertura (voz susurrante), es fonéticamente relevante en el idioma hmong (Hmong Daw).

Muchas lenguas indoarias, como el hindi, suelen tener un contraste de cuatro vías entre plosivas y africadas (sonoras, jadeantes, tenues, aspiradas) y un contraste de dos vías entre nasales (sonoras, jadeantes).

En las cinco lenguas bantúes del sureste mencionadas, las pausas de respiración (incluso si se realizan fonéticamente como aspiradas átonas) tienen un marcado efecto de bajada (o depresión) del tono en las vocales tautosilábicas siguientes.

Por ejemplo, en ambas lenguas, el mecanismo morfológico estándar para conseguir la cópula morfosintáctica es simplemente ejecutar la sílaba prefija del sustantivo como jadeante (o 'deprimida').

En algunos dialectos del español coloquial también se puede observar la voz jadeante en lugar de la coda /s/ debuccalizada, por ejemplo [ˈtoðoɦ lo ˈθiɦneh som ˈblaŋkoh] para "todos los cisnes son blancos".