El nombre hectocótilo deriva del griego ἕκατον hectós, 'cien', y κοτύλη kotýlē, 'cavidad', indicando 'que tiene cien ventosas'.[2] El término hectocótilo fue acuñado por Georges Cuvier, quien fue el primer científico moderno en encontrarlo, bajo el manto de un argonauta hembra y creyendo que era un parásito le dio el nombre genérico de Hectocotylus, un nombre que se usó rápidamente para designar ese brazo especial para la reproducción de octópodos.A veces incluso se afirma que el macho tiene una especie de pene en uno de sus brazos, y que en este brazo están las dos cavidades más grandes; se dice que esta vara está bastante nerviosa; está unido a la mitad del brazo donde está; y el macho lo lleva completamente al tronco de la hembra.(2) Φασὶ δέ τινες καὶ τὸν ἄρρενα ἔχειν αἰδοιῶδές τι ἐν μιᾷ τῶν πλεκτανῶν, ἐν ᾗ δύο αἱ μέγισται κοτυληδόνες εἰσίν· εἶναι δὲ τὸ τοιοῦτον ὥσπερ νευρῶδες, μέχρι εἰς μέσην τὴν πλεκτάνην προσπεφυκὸς ἅπαν, ᾗ ἐσπιφράναι εἰς τὸν μυκτῆρα τῆς θηλείας.La forma acabada la hectocótilo punta fue muy utilizada para la sistemática del pulpo.
Ilustración original de
Cuvier
de uno de los hectocotilos de un pulpo, pero que se publicó confundiéndolo con una nueva especie de gusano parásito a la que denominó
Hectocotile octopodis
.