Los ingredientes principales que la caracterizan son carne (de cerdo o res), chile y frijoles.
La receta estadounidense consistía en carne seca, manteca, chile seco (usualmente chile piquín) y sal, los cuales se mezclaban y dejada a secar en ladrillos, pudiendo después ser hervidos en cazos en las vías del tren.
El San Antonio Chili Stand estaba en operación en la Exposición Mundial Colombina de Chicago, lo que ayudó a difundir un gusto por el chili en otras partes de Estados Unidos.
Se pronuncian chile, chili y chilli igual en inglés.
Existen muchas variaciones acerca de su preparación dependiendo la región, pero principalmente se suele elaborar con tomate, cebolla, frijoles, etc.