El marketing basado en datos es un proceso en el que los especialistas en marketing emplean un proceso para obtener información sobre el comportamiento del consumidor, incluidos los patrones de compra, la eficacia de los anuncios y los hábitos de navegación. Los métodos contemporáneos utilizan estrategias de big data para recopilar y analizar información sobre las interacciones y el compromiso de los consumidores, con el objetivo de predecir comportamientos futuros. Este análisis implica evaluar los datos existentes, adquirir nuevos datos y organizarlos e interpretarlos sistemáticamente para mejorar las estrategias de marketing. El objetivo principal es comprender y abordar mejor las necesidades de los clientes. La investigación de mercado proporciona una comprensión detallada de las preferencias de los consumidores.
El marketing contemporáneo basado en datos se remonta a la década de 1980 y al surgimiento del marketing de bases de datos , que aumentó la facilidad de personalizar las comunicaciones con los clientes. [1]
Mediante el uso de herramientas analíticas, los especialistas en marketing intentan comprender el comportamiento del cliente y tomar decisiones informadas basadas en los datos. [2]
Los minoristas de comercio electrónico utilizan el marketing basado en datos para intentar mejorar la experiencia del cliente y aumentar las ventas. Un ejemplo citado en Harvard Business Review es Vineyard Vines, una marca de moda con tiendas físicas y un catálogo de productos en línea . La empresa ha utilizado una plataforma de inteligencia artificial (IA) para obtener conocimiento sobre sus clientes a partir de las acciones que realizan o no en el sitio de comercio electrónico. Las comunicaciones por correo electrónico o redes sociales se activan automáticamente en ciertos puntos, como el abandono del carrito. Esta información también se utiliza para refinar el marketing en motores de búsqueda. [3]