Su actividad se financia con aportaciones del Gobierno federal y la venta de publicidad.Siguiendo sus recomendaciones, se reformó la Ley de Radiodifusión para crear una nueva empresa pública que asumiría el control de las emisoras 2EA y 3EA y expandiría el servicio al resto del país.La señal estaba restringida a las tardes y tuvo buena aceptación entre su público objetivo, razón por la que en 1983 pudo sintonizarse en Canberra y otros puntos de Nueva Gales del Sur.[4] La oposición frontal de las minorías étnicas motivó que Hawke diese marcha atrás.[3] Un año después este permiso se generalizó con limitaciones: solo puede emitir cinco minutos de anuncios cada hora.[1] En Australia no existe un impuesto específico para mantener este servicio público; el Gobierno federal otorga fondos a cada grupo en función de su importancia.[9] Cada programa es un magacín informativo que dura sesenta minutos y está producido en el idioma propio de cada comunidad.La cifra y cobertura por idiomas se actualiza cada cinco años sobre la base de un censo.[9] Gestiona seis canales de televisión: SBS ofrece programación generalista con especial atención a la información, la divulgación y los acontecimientos en directo.Con anterioridad, la SBS operaba dos canales exclusivos para Foxtel: World Movies (cine internacional en versión original) y STUDIO (artes).La mayoría son originalmente en inglés, pero incorporan subtítulos si se emiten en otra lengua.