La Ley de 1968 sobre el campo (c. 41) es una ley del Parlamento del Reino Unido que amplió las funciones de conservación y recreación de la Comisión de Parques Nacionales existente y la rebautizó como Comisión del Campo . Preveía la creación de parques rurales y otorgaba a las autoridades locales ciertos poderes con respecto a la gestión de tierras comunales y la provisión de sitios para acampar y hacer picnics, y preveía subvenciones a dichos organismos para su creación. Preveía el empleo de guardabosques y la elaboración de ordenanzas en relación con dichas instalaciones.
La Ley confirió poderes a ciertas autoridades para ejercer control sobre la navegación en cuerpos de agua dentro de parques nacionales y sobre la conversión de páramos y brezales a la agricultura. Estableció disposiciones sobre " áreas de valor científico especial " y el acceso a "campo abierto" según se define en la Ley de Parques Nacionales y Acceso al Campo de 1949 e introdujo otras modificaciones a la Ley de 1949.
Otorgó a las empresas de agua y a la Comisión Forestal poderes para garantizar el acceso y disfrute público en los embalses y bosques y sus alrededores, y modificó aspectos de la Ley Forestal de 1967, incluida la disposición sobre compensación por la emisión de órdenes de preservación de árboles .
La Ley otorgó poderes y obligaciones a las autoridades de carreteras en lo que respecta a la señalización de los caminos públicos y al mantenimiento de los portillos y las puertas de los caminos. Introdujo disposiciones sobre el arado y la rehabilitación de los caminos públicos durante las operaciones agrícolas y también dispuso que las bicicletas utilizaran los caminos públicos para montar a caballo. Se establecieron otras disposiciones en lo que respecta a las órdenes de regulación del tráfico en algunas zonas rurales.
La Ley introdujo algunas otras disposiciones diversas [1]
Las conferencias sobre el campo celebradas en 1963 y 1965 condujeron a la publicación en 1966 de un libro blanco del Gobierno titulado Ocio en el campo, que proponía , entre otras cosas , la creación de parques rurales cerca de los centros de población para aliviar la presión sobre las zonas más silvestres. Al año siguiente, la publicación del informe del Comité Gosling recomendó una serie de propuestas relativas al acceso al campo. El proyecto de ley sobre el campo que se presentó entonces al Parlamento se basó en estos dos informes. [2]