Durante este plazo de tiempo, hizo viajes científicos a la Florida (1892-1893) y el mar Caspio (1899).
En lo que respecta a su investigación zoológica, su enfoque principal fue los tratados de mamíferos, aves y peces, pero también hizo contribuciones significativas con sus estudios de reptiles y anfibios.
Fue la autoridad binomial de numerosos taxones, y cuenta con varias especies que llevan su nombre, como Onykia loennbergii.
[2] El zoólogo belgabritánico George Albert Boulenger nombró una pequeña serpiente elápida venenosa y endémica de Nueva Guinea, Apisthocalamus loennbergii, en su honor, aunque esta especie es ahora un sinónimo de Toxicocalamus loriae.
Como conservacionista trabajó arduamente por las leyes que protegen a las aves acuáticas y los renos.