Syed Manzoorul Islam (nacido el 18 de enero de 1951) es un crítico, escritor y ex profesor de la Universidad de Dhaka de Bangladesh . [1] Como crítico literario, ha escrito críticas sobre escritores como Michael Madhusudan Dutt , Kazi Nazrul Islam , Sudhindranath Dutta , Samar Sen y Shamsur Rahman . [2] Recibió un Premio Literario de la Academia Bangla en 1996, [2] y su colección de cuentos de 2005, Prem o Prarthanar Galpo, fue el libro del año de Prothom Alo . Se convirtió en presidente de PEN Bangladesh en enero de 2018. [3]
Manzoor nació en la ciudad de Sylhet de Syed Amirul Islam y Rabeya Khatun. Aprobó el examen de ingreso de Sylhet Government Pilot High School en 1966 y el examen intermedio de Sylhet MC College en 1968. [ cita necesaria ] Recibió su título de grado y posgrado de la Universidad de Dhaka , respectivamente, en 1971 y 1972. Posteriormente fue a Canadá y obtuvo un doctorado en la Queen's University , Kingston en 1981. En 1989, fue a la Universidad del Sur de Mississippi en Hattiesburg como becario Fulbright y enseñó allí durante un semestre. Se retiró del puesto docente en la Universidad de Dhaka y se unió a la Universidad de Artes Liberales de Bangladesh . [3]
Manzoor solía escribir desde su infancia. Mientras leía en la sexta clase, publicó sus escritos en una revista, Shikkhok Samachar . [4] Durante sus días universitarios como estudiante, el padre de su amigo enfermó y murió de dolor. Esto afectó emocionalmente a Manzoor y lo llevó a escribir su primera historia, "Bishal Mrittu" en 1973. [4] Recibió una respuesta positiva; pero se abstuvo de publicar nada durante sus días en Canadá. A su regreso a Bangladesh, volvió a escribir y comenzó a colaborar regularmente en una columna "Olosh Diner Hawa" en la sección literaria del Dainik Sangbad . Escribió sobre temas como el arte y la literatura. En 1989, Manzoor comenzó a escribir para la revista Bichinta , que publicó muchas de sus historias posmodernas.
Manzoor se describe a sí mismo como "un crítico de formación y un escritor por obligación". [5] Aunque escribe en muchos géneros, él mismo valora su trabajo de ficción más que sus otros escritos. [5] En sus relatos suele incorporar sus propias experiencias. Intenta vivir la vida de sus personajes, viendo el mundo a través de sus ojos y describiendo su dolor y felicidad. [5] Sobre la naturaleza surrealista de sus escritos, dijo que en su infancia solía escuchar cuentos de hadas en los que los elementos surrealistas eran una parte integral y que le daban a sus escritos una textura similar. [5] Cree que "lo surrealista es la otra cara de la realidad: es lo que da sentido a nuestra cotidianidad". [5]