Nacido en Jackson, Misisipi, Spann trascendió por su particular estilo a la hora de ejecutar el piano.
Empezó tocando el piano a los ocho años de edad, influenciado por su vecino Friday Ford.
Su piano puede oírse en las grabaciones de Howlin' Wolf y Bo Diddley realizadas para dicho sello.
Spann permanece en la banda de Waters hasta 1968, donde decide emprender su carrera solista.
El único registro para Chess que interviene él como solista, se limita a un sencillo de 1954: "It Must Have Been the Devil", que cuenta con un joven B. B. King en la guitarra.