Así, logran rodar, con negativos de fondos militares, unidos a cartas y testimonios de soldados europeos, Priggionieri di Guerra (1995) y Su tutte le vete è la pace (1998), sobre la Primera Guerra Mundial.
Con Oh Uomo (2005), sitúan en el centro de la representación el cuerpo mutilado post-bélico.
Esto supone una posible “Trilogía de la Guerra”, cuyas imágenes anticipan, para ellos, futuras conflagraciones.
hombre (2004), donde usan caras de niños, hinchadas, destrozadas y monstruosamente rehechas, con prótesis, en contraste con las tropas italianas que desfilan orgullosas, preparadas para invadir África.
Tratan en suma de la violencia dominadora entre los humanos, y sus repercusiones actuales, con sus amenazas tan evidentes hoyen el siglo XXI, pues, dicen, "cada época tiene su fascismo".
En 2014 se hizo también, en el Reina Sofía de Madrid, un homenaje a su cine.