Willaq Pirqa, el cine de mi pueblo

[4]​ Sistu y su pequeña comunidad en los Andes descubren la magia del cine.

Un día encuentra el canchón vacío, el cine se ha ido.

[6]​ Posteriormente, se inició el rodaje que duró 5 semanas en Maras y Moray, Cusco.

[9]​[10]​ En su segunda semana, las salas se reducirían a 2 para luego solo exhibirse en cines de Cineplanet y otras cadenas que se sumarian al éxito durmiente.

[14]​ Finalizó su trayectoria por cines peruanos con 83 382 espectadores tras 14 semanas,[15]​ convirtiéndose en la película en lengua quechua más vista en el Perú.