Walter Ufer

Ufer era hijo de inmigrantes alemanes y se crio en Kentucky.

Como muchos de sus compañeros artistas vinculados a la comunidad germano-estadounidense de Indianápolis, se fue a Alemania para estudiar; se formó en Hamburgo y Dresde.

Después de su estancia en Chicago, regresó a Alemania, a Múnich, en 1911 e inició su trabajo como artista plástico montando un estudio en la ciudad.

Tres años después, al comenzar la Primera Guerra Mundial, volvió a su ciudad natal, convirtiéndose en uno de los miembros del llamado Taos Ten, un grupo local de artistas integrado en Taos Society of Artists.

Sus pinturas de Nuevo México se caracterizan por escenas costumbristas de la vida del nativo americano y paisajes ejecutados con singular brillo y colorido.