El objetivo de cada equipo es sumar puntos enviando una pelota por encima de la red para que caiga en el suelo en la cancha del oponente y evitar el mismo esfuerzo por parte del oponente.
El deporte se originó en Austria como una variante del voleibol de playa.
[1] El voleibol se ha jugado sobre la nieve durante décadas, especialmente en países como Rusia, Austria y Suiza, aunque sin reglas codificadas específicamente, sino simplemente como una variación del juego de voleibol playa.
[2] El deporte ganó popularidad en Wagrain, Austria, en 2008,[3] y el primer Snow Volleyball Tour se organizó al año siguiente.
[9] Desde entonces, se han realizado más esfuerzos para aumentar la participación global en el deporte.
La nieve debe tener al menos 30 cm (11,8 pulgadas) de profundidad, estar lo más nivelada posible y libre de peligros potenciales, como rocas, que podrían causar lesiones a los jugadores.
La parte superior de la red está a 2,43 m (7 pies 11 11⁄16 pulgadas) por encima del centro de la cancha para la competencia masculina y a 2,24 m (7 pies 4 3⁄16 pulgadas) para la competencia femenina.
El árbitro lanza una moneda antes de los calentamientos para determinar qué equipo sirve primero y en qué lado de la cancha comienzan los equipos para los dos primeros sets.
[11] Los tres contactos suelen consistir primero en el golpe o pase , segundo en el juego para que la trayectoria de la pelota se dirija hacia un lugar donde pueda ser golpeado, y tercero en el remate (saltar, levantar un brazo por encima de la cabeza y golpear la pelota para que baje rápidamente al suelo en la cancha del oponente) o tiro para devolver la pelota por encima de la red.
El equipo en defensa intenta evitar que el equipo atacante dirija el balón a su campo: el jugador o jugadores en la red saltan y se estiran por encima de la parte superior (y, si es posible, a través del plano) de la red para bloquear el balón atacado.
Si la pelota es golpeada alrededor, por encima o a través del bloqueo, los jugadores defensivos ubicados detrás del bloqueador intentan controlar la pelota con un empujón (generalmente un pase de antebrazo).