La forma del volante lo hace muy aerodinámico, y a pesar de la orientación inicial al golpearlo, enseguida se gira situándose el corcho por delante.
Los volantes son frágiles y se rompen fácilmente, por lo que en un partido de alto nivel es normal ver cambiar el volante cada pocos puntos.
El plástico utilizado para este tipo de volantes es el nailon.
Sin embargo, el tacto y el control sobre estos es mucho menor, por lo que a nivel principiante se utilizan los volantes de nailon, mientras que los de plumas se utilizan para un nivel más avanzado.
El comportamiento aerodinámico del volante y su estabilidad en el aire fueron estudiados para diseñar el vehículo espacial SpaceShipOne y su vuelo de reentrada a la atmósfera.