En el equipo puede haber varias personas y cada uno se encarga de distintas partes, pero cada integrante del equipo entiende el proyecto en su totalidad,[1] además cada integrante ayuda a los otros, por medio de su colaboración, a visualizar y desarrollar más profundamente el proyecto.
Al culminar este paso tenemos un modelo básico que necesita ser refinado.
Este modelo o prototipo inicial permite corregir desproporciones que no se ven en 2d, principalmente estéticas.
Permite prever cómo quedarán estas áreas luego de ser construidas.
Este tipo de modelo captura los edificios desde todos los ángulos posibles, permite percibir sus proporciones, forma, color, textura.
Una vez culminado el proceso de modelado inicial comienzan a sugerirse puntos de vista interesantes, desde posiciones donde será visualizado en su entorno real, así como puntos de vista que comienzan a revelar puntos débiles que todavía requieren más diseño o una mejor solución, empiezan a verse cuáles elementos se ven fuera de proporción, que partes se ven mejor y peor estéticamente, empiezan a verse errores en ideas que parecían buenas en 2d pero en 3d obviamente requieren ajustarse y mejorarse.
Se descartan muchas posibilidades que parecían viables antes de comenzar a modelar, pero surgen nuevas ideas al momento de comenzar a experimentar la tridimensionalidad del proyecto.
A medida que se van haciendo cambios, el arquitecto encargado del proyecto va actualizando las plantas y fachadas, es muy importante mantener la comunicación en ambos sentidos.
Cada vez más se introducen nuevos términos como sustentabilidad o sostenibilidad, Green building energía acumulada, LEED (Leadership in Energy & Environmental Design), huella de carbono, impacto ambiental, control de la radiación solar.
Conocida como GI (Global Ilumination) por sus siglas en inglés, que inciden en forma omnidireccional, o sea en todas direcciones iluminando suavemente las partes de la escena no iluminadas directamente por el sol, y llega hasta iluminar dentro de las edificaciones a través de las ventanas y aberturas.
La temperatura del color de la luz se mide en Kelvin desde que William Thompson Kelvin realizó que el carbón emite distintos colores dependiendo de su temperatura.
Dependiendo del tipo de proyecto se selecciona cual es el escenario que vamos a usar para generar la iluminación.