Nosa Señora das Areas

La leyenda dice que cuando los vikingos asaltaron el pueblo en el siglo XII, quemaron y ultrajaron todas las imágenes religiosas del templo.

Sin embargo, al intentar decapitar la Virgen de las Arenas, no fueron capaces, por lo que lo interpretaron como una advertencia divina y huyeron despavoridos abandonando el pueblo.

Desde entonces se considera la patrona protectora de la villa Aun hoy conserva en el cuello las marcas del daño.

Se celebra el día 8 de septiembre con una procesión por las calles del pueblo y una ofrenda floral en la iglesia parroquial.

Hasta hace unos años, la misa y la ofrenda se celebraban en la plaza del pueblo, pero las reticencias que ponía el párroco D. Agustín Fariña, hicieron que se trasladara el acto al interior de la iglesia.