El reloj de cristal es una lámina de vidrio, de forma circular cóncava-convexa, que se utiliza en química, física o biología para medir la masa o el peso de productos sólidos en cantidad, evaporar pequeñas cantidades de líquidos en muestras sólidas, así como de cubierta en vasos de precipitado para evitar la entrada de polvo, y para contener sustancias parcialmente corrosivas.
[1] También se puede utilizar para colocar pequeñas cantidades de substancias debajo del ocular de un microscopio.
[1] Es de tamaño medio y relativamente delicado, aunque estable para su función práctica y contenedora.
Se llama así por su parecido con el vidrio de los antiguos relojes de bolsillo.
El vidrio de reloj está hecho preferentemente de un metal-vidrio especial, que puede resistir hasta 150 °C.