[3] Si se produce una acción polémica, los jueces la revisan e informan al árbitro para que tome la decisión final.La revisión está limitada a cuatro casos con el juego interrumpido: goles, penales, expulsiones directas y confusión de identidad.[4] La FIFA limita el uso del árbitro asistente de video a cuatro acciones que pueden cambiar el rumbo del juego: goles, penales, expulsiones directas (nunca por doble amarilla) y confusión de identidad en amonestados.[6] El objetivo final del árbitro asistente de video no es garantizar una precisión total en las decisiones arbitrales, sino revertir aquellos errores humanos que puedan condicionar el resultado, y limitándolo a los supuestos establecidos por la IFAB.En las semifinales entre Kashima Antlers y Atlético Nacional, el colegiado húngaro Viktor Kassai señaló un penalti al equipo japonés después de ser advertido por el asistente de video, aunque tardó dos minutos en concederlo.[16] El nuevo sistema tuvo críticas mixtas en el mundo del fútbol: mientras algunos consideraban que un mal uso podía generar dudas y romper el ritmo de juego,[7][16][17] otros defendieron la tecnología para conseguir un resultado justo.[20][21] El VAR comenzó a aplicarse en 2017, en competiciones como la Major League Soccer estadounidense, la A-League australiana, y en partidos amistosos de selecciones nacionales.