Su padre, Gilbert Auclair, carpintero, se había establecido en Commentry, en donde tenía un negocio de aserradero.
[5][6] Cuando su padre murió en 1897, Victor Auclair se hizo cargo de la dirección del aserradero.
Permaneció en ese país hasta 1924 en donde ejecutó variadas obras como arquitecto e ingeniero.
Fue sepultado el cementerio de Étiolles (Essonne), en donde su hija Marcelle tenía una casa.
[12][13][14] A pesar del carácter innovador del uso del hormigón armado, el hormigón utilizado en ese momento no tenía todas las cualidades antisísmicas requeridas y algunos edificios sufrieron daños graves con terremotos posteriores, en especial la Capilla de la Providencia con el terremoto de 1985.