[1][4] Estudió en el convento de San Vicente Ferrer, y después se trasladó hasta el convento de Santo Domingo de Huesca para dedicarse a la enseñanza.
Estuvo desempeñando esta labor durante tan solo tres años, ya que, con el comienzo de la Guerra de la Independencia Española, los franceses lo capturaron, y lo enviaron a la ciudad de Aux, en Aquitania, donde estuvo asistiendo durante catorce meses a los prisioneros españoles de aquel hospital.
Pasado este tiempo, junto con dos compañeros, logró huir del lugar.
[4] Una vez finalizada la guerra, regresó al convento de Predicadores en Zaragoza, donde fue nombrado regente de estudios.
[4][5][2] Ramón Durán de Corps acabó ocupando su lugar como sucesor en el obispado.