Una valla sandwich es un soporte publicitario diseñado para colocarse de pie sobre el suelo.
Consiste en dos paneles de baja altura unidos por cuerdas o más comúnmente, por bisagras, que se abren y colocan en el pavimento adoptando así una forma de cuña.
Generalmente, se sitúan en el exterior junto al establecimiento cuyos productos están promocionando constituyendo así un reclamo para el paseante.
Entre sus ventajas, destacan: Una variación de las vallas sandwich la constituyen las vallas pizarra en las que el dueño del establecimiento escribe con tizas de uno o varios colores anuncios relativos a su producto.
Así, es habitual encontrarlas junto a bares y restaurantes conteniendo el menú del día, la tabla de precios o alguna oferta especial.