Vía sensitiva
Hay tres tipos de vías sensitivas: las viscerales, como muchos músculos del brazo , pierna ,trasero , etc.. ,como el gusto y el olfato, las especiales como la vista, el oído y el equilibrio, y la somática general, es decir, la sensación táctil, que más bien es una mezcla de diferentes sensitividades: tacto fino, presión firme, propiocepción, calor y frío.[1] Las primeras neuronas sensitivas son células pseudounipolares amielínicas cuyo cuerpo se halla en los ganglios raquídeos.Estas ramas ascienden o descienden y van a los cordones blancos, sea grácilis o cuneatus, en orden de caudal a cefálico; es decir, primero se establecen en ellos las neuronas más bajas del cuerpo, y conforme sube la médula, se van sobreponiendo láminas lateralmente a ellos.En la primera neurona sensitiva hay dendritas adaptadas para recibir el calor que llega directo a la piel y es transportada por medio de impulsos nerviosos hasta el hipotálamo y captado por el cerebro Entran en contacto con las segundas neuronas de la vía, que se encuentran en la sustancia gelatinosa de Rolando.Ascienden hasta contactarse con las terceras neuronas, que son talámicas.